Esta exposición la pudimos ver en Madrid, en la Biblioteca Nacional. Nada más llegar, fuimos recibidos por un guía, que nos dio un folleto explicativo de la exposición y un cuadernillo de actividades.
Pasa Página, como podemos leer en el cuadernillo de actividades que nos dieron, es, ante todo, un homenaje a la lectura. Un recorrido cómplice por los libros, por quienes los hacen y por las historias que se esconden en ellos. Vidas que solo cobran sentido cuando los lectores las hacemos nuestras y las convertimos en parte de nuestra propia existencia.
Y como la lectura es un ámbito de libertad y de intimidad, no hay un único camino en este viaje. Al revés: en él encontramos tantos itinerarios como queramos inventar, de modo que cada visitante pueda elegir su propio rumbo a través de las diferentes secciones de esta exposición. Los organizadores nos proponían cuatro diferentes: el viaje literario, el viaje emocional, el viaje creativo y el viaje profesional.